viernes, 9 de septiembre de 2011
9:12 | 
Publicado por
Unknown
Hoy le escribía una carta a un amigo que pasa por unos momentos delicados y en donde trataba de expresarle, mi visión ante su proceso. Esa reflexión surge desde el momento en el que termino mi sesión de biodanza de ayer y ha continuado a lo largo de toda la jornada. Comparto contigo mi vivencia, con el permiso de mi amigo.
Creo que dentro del proceso en el que estamos todos de cambios, a veces con desesperanzas, desconfianzas, falta de motivación, y otras con ganas de comernos el mundo, la biodanza o cualquier otra disciplina, que nos haga conectar con nuestro centro, podría ser ese corrientazo o punto de palanca, para volver a impulsarnos y tomar de nuevo las riendas de nuestra vida.
Anoche me emocione al principio de la danza y se me cristalizaron los ojos, y un nudo se apoderó de mi garganta, me contuve y no me hizo bien. Me emociono sentir, que tú estabas en el lugar correcto en el momento preciso. Pensé y así te lo quería hacer saber con la mirada, “Yo creo que esto te puede hacer mucho bien. Aprovéchalo”.
Para mí ha sido un descubrimiento inesperado, un regalo, una respuesta a mi búsqueda de algo que me hicieran acallar mi mente. Yo voy a seguir yendo. Necesito ese espacio de desconexión, de encuentro, de reconocimiento, no quiero perderlo.
Amigo, todas las esperanzas están dentro de ti. La llave para la solución de cualquiera de las dificultades está dentro de ti, depende mucho de tu actitud ante las cosas, ante la vida, y ese plan de acciones, para acercarte a esos objetivos alcanzables, medibles y que tengan sentido.
Te animo a continuar, a que empieces de cero, a que veas en cada día que amanece una nueva oportunidad en el camino. Levanta los hombros, alza la barbilla y mira el horizonte, se utópico un instante.
Sueña y mírate como ese niño al que un día tu madre, estaba enseñando a caminar y se caía una y otra vez, hasta que de repente un día, mantuvo el equilibrio, confió en sus piernas, experimentó el peso de las diferentes partes de su cuerpo, cayendo y volviéndose a levantar, apoyándose agarrándose a lo que tenía a mano, observando las reacciones de sus seres cercanos, intentando una y otra vez dar un paso más… y otro,…y otro… hasta que ya, sin agarrarse de la mano de mamá ya no camino, sino que corrió ¡¡¡¡y de qué manera corrió!!!!
Nada ha cambiado. Seguimos haciendo lo mismo… cada día…aprendiendo, desequilibrándonos y volviendo a equilibrarnos…
Amigo, piensa que muchos te podemos dar la mano, pero tenemos nuestro camino y de la misma forma que lo vimos ayer en biodanza, CAMINAR, es la expresión más clara de nuestra actitud frente a la vida.
Caminante no hay camino, se hace camino al andar. Sigue construyendo tu vida a cada paso, que cada paso te coloca en uno u otro punto de la vida.
Un abrazo desde mi corazón.
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La importancia del propósito....
....es que todo tome sentido
2 comentarios:
Siempre consigues que vea tu luz en mi camino a través de tu señal desde el corazón... Besos... Gracias !!!
Gracias por compartir y mostrar tan lindo camino. :)
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